El blog de Claudia&Julia

La primera vez que hice pasta casera y vi lo sencillo que era (por alguna razón me lo había imaginado mucho más complicado), decidí hacerme mi pasta siempre. Ni siquiera tenía una máquina de pasta, la estiraba con un rodillo, la enrollaba y cortaba para obtener tallarines. Con mis compañeras de piso experimentábamos con tinta de sepia, espinacas, cúrcuma etc. para darle colores y aromas distintos. 

La globalización nos ha traído platos riquísimos de lejanas tierras, entre ellos toda la pasta que se consume en Japón, como estos fideos soba caseros que podemos preparar con el accesorio para pasta del robot KitchenAid y que metemos en un orientalizante caldito de verduras. Ñam.

Es difícil encontrar a alguien al que no le guste la pasta, ¿verdad?. Yo diría que es casi imposible, ya que existen multitud de variedades y sería rarísimo no encontrar una que se adapte a tus gustos. Pues con los raviolis pasa lo mismo, esta pasta se puede rellenar de cualquier cosa que puedas imaginar, incluso existe la versión de ravioli dulce.

Si hay un plato que gusta en casa es la pasta. Y esta lasagna de confit de pato es una versión de fiesta que hacemos muy de vez en cuando. La reservamos para ocasiones especiales, una celebración, un cumpleaños o incluso el día de año nuevo. La gracia de esta lasagna no es solo ese relleno más festivo, sino que la pasta podrás decir que la has hecho tu. Y eso sin duda siempre es un plus.

He de decir que me pierden las lasañas, en todas sus versiones, de carne, de salmón y espinacas o de verduras,... Todas me parecen fantásticas y deliciosas. Sé que cada uno tenemos un plato favorito de la cocina italiana y que en casa lo versionamos a nuestra manera, este es el caso de la lasaña que os traigo hoy, una lasaña vegetal, plato que se me antojaba a todas horas cuando estaba embarazada, un plato sencillo de preparar a la par que delicioso.

Mi hijo es un fan incondicional de la pasta con queso, como casi todos los jóvenes del mundo mundial. Mi objetivo siempre es que coma hortalizas y más hortalizas, esas que parece que él se niega cada vez más a comer. Por eso invento versiones diferentes de sus platos favoritos con verduras.

Los Pierogi son uno de los platos más típicos de la cocina polaca. Básicamente, consiste en pasta rellena de diferentes variedades. Se podría decir que son bastante parecidos a los ravioli.

El arroz y costra o arroz con costra (dependiendo del municipio donde nos encontremos) es sin duda uno de los platos más representativo alicantino. Este tradicional arroz, es típico en las comarcas de la Vega Baja, Bajo Vinalopó y la Marina Alta.