Bizcochos salados de parmesano y cebolleta

Hoy traemos una receta que redefine el concepto de los bizcochos, llevándolos al territorio de los sabores salados y sofisticados sin un gramo de azúcar: Bizcochos salados de parmesano y cebolleta, preparados en ramequines individuales.

Esta versión salada promete encantar a aquellos que buscan disfrutar de la cocina sin remordimientos, fusionando la intensidad del queso parmesano con el toque fresco y sutilmente picante de la cebolleta. Cada bizcocho individual es una promesa de placer y elegancia, perfecto para darse un capricho saludable en cualquier momento.

Estos bizcochos no solo rompen con la tradición, sino que abren la puerta a un mundo de posibilidades culinarias donde el sabor y el placer libres de remordimientos van de la mano. ¡Es hora de sorprenderse!

Sobre la receta de bizcochos de queso parmesano (sin azúcar)

La receta de bizcochos salados de parmesano y cebolleta sin azúcar no solo es viable, sino que es deliciosa. La ausencia de azúcar en este tipo de recetas es completamente normal y deseable, dado su carácter salado y la presencia de ingredientes con fuertes perfiles de sabor como el parmesano, la cebolleta, y las especias. El azúcar suele ser un ingrediente clave en los bizcochos y otras preparaciones dulces para equilibrar sabores y contribuir a la textura, pero en recetas saladas, otros componentes como la mantequilla, la leche, y el queso cumplen esa función, aportando humedad, grasa, y sabor que se combinan para crear una textura esponjosa y un sabor rico y complejo.

La combinación de ingredientes de la receta aporta una excelente estructura al bizcocho gracias a la harina de repostería, que es ideal para este tipo de preparaciones por su capacidad para crear texturas ligeras y aireadas. El bicarbonato, por su parte, actúa como agente leudante en ausencia de azúcar, ayudando a que el bizcocho suba y quede esponjoso (sumado a la acción del batido, que le aporta aire a la masa). La sal, la pimienta negra, el pimentón, y especialmente el parmesano rallado, ofrecen profundidad y complejidad al sabor, mientras que las cebolletas añaden un toque fresco y ligeramente picante que contrasta maravillosamente con la riqueza del queso y la mantequilla.

Ingredientes

• 3 huevos XL
• 650 ml de leche
• 3 cdas de mantequilla derretida
• 60 g de parmesano rallado fino
• 240 g de harina de repostería
• 1 cdta de sal
• 1 cdta rasa de bicarbonato
• 1 cdta de pimienta negra molida
• ½ cdta de pimentón
• 4 cebolletas
• Mantequilla o spray desmoldante, para untar los ramequines

Preparación

1. Precalienta el horno a 200°C.
2. Pica las cebolletas muy finas y reserva.
3. Embadurna tus ramequines Le Creuset con mantequilla o spray desmoldante.
4. En un bol, bate los huevos con un batidor, y añade la leche y la mantequilla derretida.
5. A continuación, añade el queso parmesano.
6. Añade la harina tamizada, el bicarbonato, la sal, la pimienta y el pimentón, sin dejar de mezclar con el batidor.
7. Una vez integrado, añade las cebolletas picadas muy finas, y mezcla hasta obtener una masa homogénea, con las cebollas repartidas por toda la masa.
8. Vierte la mezcla en los ramequines preparados y hornea durante 35 minutos o hasta que estén dorados y cocidos por completo.