Los Pierogi son uno de los platos más típicos de la cocina polaca. Básicamente, consiste en pasta rellena de diferentes variedades. Se podría decir que son bastante parecidos a los ravioli.
Los pierogi son una pasta rellena con forma semicircular similar a la empanadilla que todos conocemos aunque, cocida en agua al igual que un ravioli pero, que a su vez, se fríe en abundante mantequilla y/o aceite.
Un pieróg, puede ir relleno de multitud de variedades como anteriormente he mencionado (carne, fruta, col, etc..) pero, en este caso nos vamos a centrar en el tradicional relleno de queso, cebolla y puré de patata.
Para que el relleno de estos pierogi quede en su punto exacto, debemos cocer las patatas el día anterior. Esto hará que el puré de patata se seque y no humedezca la masa del pieróg. Un truco que va muy bien es cocinar las patatas en el microondas, esto además de ahorrarnos tiempo hace que las patatas no salgan tan acuosas como hervidas. Si te decantas por este método, tan solo debes lavar las patatas (con piel), envolverlas en film trasparente (apto para microondas), pinchar cada una de ellas un par de veces con la punta de un cuchillo, colocar en un recipiente apto para microondas y calentar de 7 a 10 minutos. Las patatas estarán lista cuando al pinchar con un cuchillo éste se introduzca sin problemas.
Por otro lado, el queso que vamos a utilizar será requesón o ricotta, (el queso polaco que se utiliza es difícil de encontrar) puesto que estos quesos son bastante húmedos, debemos intentar que queden lo más seco posible. Para ello podemos colocar el requesón en una malla fina durante 24h metido en la nevera y dejar que pierda el exceso de agua. De este modo nos quedarán unos pierogi perfectos.
Cada pieróg debe rellenarse con abundante relleno, que no te asuste meterle el relleno suficiente, aunque parezca que el diámetro (8 cm) de la masa no será suficiente para cerrarlo, no te preocupes, la masa es muy elástica y cerrará a la perfección. Igualmente tampoco debes temer la finura de esta masa (3 mm), cuanto más fina sea, mejor se cocinaran y, si dispones de un rodillo con discos medidores, este proceso será "coser y cantar".
Pala de madera de acacia T&G, cuchillos de acero carbono Pallarès y sartén de hierro fundido Skeppshult
Ingredientes
Para el relleno:
- 250 g de patata cocida (ver introducción)
- 250 g de queso ricotta escurrido (ver introducción)
- 2 cebollas medianas cortadas en taquitos finos
- 2 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
- Eneldo al gusto
- Un puñado de sal marina
- Una pizca de pimienta
Para la masa:
- 300 g de harina de trigo común (9% proteína)
- 1 huevo L a temperatura ambiente
- 20 g de mantequilla derretida
- 120 ml de agua tibia
- Una pizca de sal marina
Preparación
- Calentamos aceite en una sartén y sofreímos la cebolla hasta que nos quede dorada. Mientras tanto en un bol a parte vamos aplastando las patatas cocidas y peladas con el queso, eneldo picado, sal y pimienta. Una vez tengamos las cebollas doraditas las pasamos a esta mezcla e incorporamos muy bien. Formamos unas 25 bolas y reservamos.
- En un bol grande tamizamos la harina y hacemos un volcán, en el centro vamos añadiendo el huevo, mantequilla derretida, sal y vamos amasando con una pala de madera mientras vertemos al agua tibia lentamente. Una vez que se hayan juntado todos los elementos, empezamos a amasar durante 5 minutos con las manos hasta obtener una masa elástica y suave. Dejamos reposar tapada unos minutos.
- Dividimos la masa en 4 partes y cubrimos 3 de ellas con un paño para que no se resequen. Sobre una superficie ligeramente enharinada estiramos una de las partes de la masa con la ayuda de un rodillo, dejando un grosor de 3 mm. Cortamos círculos de unos 8 cm y a cada uno de ellos le colocamos una bola de relleno. Para cerrar el pierogi tan solo es necesario posarlo en la palma de nuestra mano y estirar ligeramente dejando forma de media luna. Para sellar los pierogi podemos pellizcar los bordes como podéis ver en las imágenes o si te es más fácil, usar un tenedor. Los vamos reservando sobre una superficie enharinada para que no se peguen y sean fáciles de manipular.
- Ponemos una sartén de hierro a fuego muy suave con unos 50 g de mantequilla y dejamos que se derrita junto con una rama de eneldo. Reservamos.
- En una olla con agua hirviendo y sal iremos metiendo por tandas los pierogi. Al principio se sumergirán en el agua pero una vez que floten debemos cocinarlos 2 minutos exactos. Al cabo de este tiempo los iremos sacando y a su vez los introducimos en la sartén con la mantequilla.
- Cocinamos los pierogi en mantequilla hasta que su base quede ligeramente dorada. Servimos los pierogi rociándolos con mantequilla derretida, eneldo fresco picado y unas escamas de sal.
Comentarios
Claudia dijo:
Debes probarla Yvette, no hay persona que visite Polonia que no vuelva enamorada de esta receta, te encantará!
Yvette dijo:
Receta muy interesante y al parecer fácil de hacer. También es bastante diferente a lo que personalmente estoy acostumbrada a hacer. :-)