El verano y la horchata van de la mano... ¡Y vengo con una forma ideal para aprovechar la pulpa de chufa sobrante, y acompañar la horchata de la forma más deliciosa! Estas magdalenas de chufa, canela y manzana son pura esponjosidad y saben deliciosas.
Prepararlas te toma un momento, y si pensáis que cómo se me ocurre encender el horno con estos calores, os diré que, con tanto calor, ¿por qué no hacerlo? El calor del horno ni se nota ya, y menos en el tiempo que te lleva hacer estas magdalenas, ¡que tienes horneadas en 20 minutos!
¿Qué me ha encantado de la receta y por qué te la recomiendo?
- Han quedado HÍPER esponjosas, ¡Qué gusto tomarlas!
- Su sabor está muy equilibrado, creo que casan con un montón de ingredientes y momentos.
- Es una forma genial de aprovechar la chufa sobrante de hacer horchata (¡Y la chufa está llena de energía y aporta mucha fibra!).
- La compota o manzana rallada ya le aporta dulzor, con lo que puedes hacerlas con poco azúcar añadido, azúcar moreno o panela.
¿Qué otras versiones puedes hacer de esta receta?
Sin duda, probarlas así, porque saben genial... y si aún quieres combinarlas con algún otro ingrediente, añadirle pepitas de chocolate negro o cubrirlas de chocolate blanco son dos ingredientes que les queda genial. Si le añades chocolate negro, puedes sustituir unos 20 g de chufa por coco rallado, los tres ingredientes quedan genial juntos.
También puedes modificarlas substituyendo parte de la harina de trigo con harina de almendra (junto a la chufa queda muy bien).
Puedes añadirle una cucharadita de extracto de vainilla si quieres aportarle otro sabor distinto.
Si lo que buscas es un toque más afrutado, puedes añadir trocitos pequeños de manzana fresca (pelada) a la masa, o sustituir parte de la compota por plátano maduro chafado.
O si quieres aromatizarlas, añade a la receta una pizca de nuez moscada o clavo en polvo, o unas ralladuras de piel de limón o naranja.
¿Primero quieres hacer horchata?
Si buscas cómo hacer horchata casera encontrarás la receta en nuestro blog de Claudia&Julia, aquí:
Receta de cómo hacer horchata tradicional
Receta de cómo hacer horchata sin azúcar
¿Cómo puedes usar la chufa triturada tras hacer horchata?
La pulpa de chufa que queda tras hacer horchata casera (también llamada “orujo” de chufa o chufa triturada) es muy versátil y no merece ir a la basura. Tiene fibra, sabor dulce natural y un toque terroso que queda genial en muchas preparaciones (a mí me recuerda a la harina de almendra, y de hecho pienso en cómo uso esa para sacar partido a la chufa). ¡No olvides que la chufa, nutricional y culinariamente, se comporta de forma similar a un fruto seco!
Aquí te dejo varias ideas para reutilizar la chufa fácilmente en tu día a día:
- Puedes usar la pulpa de chufa en repostería: añadirla a magdalenas, bizcochos, galletas o brownies para darles más humedad, fibra y un toque rústico. Usa la chufa como si fuera harina de almendra, y acertarás.
- También es ideal para preparar barritas energéticas caseras, mezclándola con dátiles, copos de avena y frutos secos.
- En granola casera, se puede combinar con avena, miel y frutos secos, y hornear hasta que quede crujiente.
- Sirve como base de tartas tipo cheesecake (junto con galletas picadas con la mantequilla) o tartas frías, mezclada con dátiles y un poco de mantequilla o aceite.
- Se puede añadir a masas de pan o focaccia como si fuera salvado o harina integral, aportando textura y un sabor suave a fruto seco.
- Es muy útil en hamburguesas vegetales o albóndigas, mezclada con legumbres o arroz y usándola como sustituto parcial del pan rallado.
- Puedes aprovecharla en el desayuno calentando leche o bebida vegetal con una cucharada de chufa, canela y fruta: tipo porridge.
- Si no la vas a usar de inmediato, congélala en porciones pequeñas y tendrás siempre a mano una forma de reaprovecharla.
Opción bonus que tienes que probar: Al tener la chufa triturada, también puede utilizarse como exfoliante natural (sí, hablo de cosmética casera, mezclándola con aceite de coco o un poco de aceite suave verás que es un exfoliante fenomenal.
¡Pero vamos ya con la receta de estas magdalenas de chufa tan esponjosas!
Receta de magdalenas de chufa y canela
(para unas 10-12 magdalenas)
Ingredientes
- 120 g de chufa triturada (restos de horchata, bien escurridos)
- 2 huevos
- 100 g de azúcar moreno (o blanco, o mitad y mitad)
- 100 g de compota de manzana sin azúcar añadido o 100 g de manzana golden rallada
- 80 ml de nata líquida para montar (mín. 30% MG)
- 50 ml de aceite suave (girasol u oliva suave)
- 150 g de harina de trigo (o 100 g de harina + 50 g de almendra molida)
- 10 g de levadura química
- 1 cucharada de postres de canela en polvo
- Una pizca de sal
- 1/2 cucharadita de postres de pimienta blanca
Preparación
- Precalienta el horno a 170 °C con calor arriba y abajo.
- En el bol de la KitchenAid y con el batidor globo, bate los huevos con el azúcar hasta que queden espumosos... y ya no pares la máquina en ningún momento.
- Añade la chufa triturada, la compota de manzana (o manzana rallada), el aceite y la nata.
- Incorpora la harina, la levadura, la canela, la sal (y el bicarbonato si decides usarlo). Mezcla hasta obtener una masa homogénea.
- Dispón unas cápsulas de papel en el molde de magdalenas (el molde de Le Creuset hornea genial porque su interior es de acero). Llena los moldes de magdalena hasta ¾ de su capacidad. Si quieres, puedes espolvorear un poco de azúcar por encima para formar una costra.
- Hornea durante 18-22 minutos, hasta que estén doradas y, al pinchar el centro, el palillo salga limpio.
- Deja enfriar sobre una rejilla… ¡Y a disfrutar!
