Miriam, autora de El Invitado de Invierno, nos trae unos panqueques salados que, con el toque de queso y acompañados de una buena salsita, se convertirán rápidamente en una cena de lo más apetecible. ¡Buen provecho!
Hace tiempo que descubrí las tortitas saladas de verduras, que además con queso suben un nivel de excelencia. Las tortitas, panqueques o incluso crepes salados me chiflan, las comería todos los días, pero si les ponemos verduras dentro además tranquilizan nuestra conciencia. Que sí.
El fundamento de estas tortitas es que la masa se prepara con queso y verduras troceadas o hechas puré, además de los ingredientes tradicionales, es decir, los huevos, la harina, etc.
Estas tortitas saladas se pueden servir solas o con alguna salsita, como el yogur espeso aromatizado con cayena y azúcar que se ve en las fotos. El color amarillo un poco rabioso se debe únicamente a la gran proporción de huevo y a la verdura.
Crepera de hierro mineral B De Buyer, ramequines de cerámica Emile Henry, jarra de cristal Mediterránea, vasos de cristal Mediterránea y platos de porcelana Textured de Tokyo Design.
Ingredientes (para unas 12 tortitas pequeñas)
- Un buen puñado de verdura al gusto (he usado un ramo de brécol)
- 3 huevos
- Sal al gusto
- 100gr de queso fresco o requesón troceado
- 50gr de harina corriente
- 2 cdas. de aceite de oliva
- Agua para ajustar la consistencia si fuera necesario
- Alguna especia si nos gusta, como cayena, curry en polvo, pimienta, etc.
- Algo de mantequilla o aceite adicional para cuajar las tortitas
Elaboración
- La verdura que vayamos a usar en las tortitas la podemos cocinar o añadir cruda. En el caso del brécol empleado, la hemos cocinado ligeramente al vapor y luego la hemos triturado junto con la masa.
- Asimismo, la verdura puede ir completamente triturada o finamente troceada, al gusto de cada cual. Y también podemos añadir alguna hierba picada y especias. Yo he puesto un poco de cayena molida para darles un puntito picante.
- En un robot o batidora ponemos el queso, la harina, el aceite de oliva, la sal y los huevos. Mezclamos bien.
- Agregamos la verdura y trituramos hasta obtener una pasta con la consistencia de unas tortitas dulces.
- Si la pasta queda muy espesa (dependerá del líquido de la verdura y del tamaño de los huevos) añadimos algo de agua. Si por el contrario quedara muy líquida, añadiríamos algo de harina.
- Calentamos una crepera (yo he usado la De Buyer) bien untada de aceite de oliva o mantequilla, hasta que esté bastante caliente, pero sin que llegue a humear.
- Con un cucharón vamos dosificando la masa para hacer las tortitas de tamaño blinis. Cocemos por ambos lados hasta que estén bien cuajadas, dándole vuelta con una espátula con cuidado.
- Las vamos apilando en un plato, tapadas con un paño para que no se enfríen. Cuando acabemos la masa las servimos de inmediato, solas o con el condimento que prefiramos (como comentaba en la intro, una salsita de yogur aromatizado les caen estupendamente)
Ramequines de cerámica Emile Henry, jarra de cristal Mediterránea, vasos de cristal Mediterránea y platos de porcelana Textured de Tokyo Design.
Y hala, a disfrutar de un platillo facilísimo y muy sano, y perfecto para esos días en que no tienes muchas ganas de pelearte con tus hijos para que coman verdura… yo lo dejo caer.