El brioche de aceite de oliva que hoy os traigo, nada tiene que envidiar al clásico dulce de origen francés enriquecido con mantequilla. En este brioche encontraréis todas las bondades del anterior pero con el plus del aceite de oliva virgen extra.

Es espectacular la miga tan ligera, etérea y sabrosa que sale con unos pocos ingredientes. Su corteza dorada os va a enamorar desde el primer bocado. Eso sí, este brioche tiene una pega… ¡No vas a poder parar de comer, es totalmente adictivo!

Para hacer este brioche, me he decantado por un molde cerámico de Emile Henry de unos 23 centímetros. La masa he optado por dividirla en 3 partes iguales por una sencilla razón; Al hornear 3 rollos de masa en el mismo molde, luego podremos separar individualmente estas piezas, obteniendo así, 3 panes de brioche.

De esta manera podemos conservar las piezas envueltas individualmente en papel film y bolsa de congelación. Se congelan estupendamente y cuando necesites alguna rebanada, tan solo tienes que sacar una pieza y cortar las rebanadas a tu elección. Aunque la pieza esté congelada, no te preocupes, se pueden cortar rebanadas sin problema. Luego, tienes varias opciones; poner en una tostadora directamente o dejar descongelar a temperatura ambiente.

Es muy importante que para realizar este brioche uses la harina adecuada. Necesitas un harina de fuerza, con un porcentaje mínimo de 13% de proteína. Para saber el porcentaje proteico que tiene una harina, es tan sencillo como mirar la información nutricional que viene en el paquete y buscar en la tabla las proteínas.

Pala de madera de acacia T&G, rasqueta para pan Birkmann y cuchillo de acero carbono Pallarès

Ingredientes

  • 500 g de harina de fuerza (13% proteína)
  • 10 g de levadura instantánea de panadero (no confundir con levadura química Royal)
  • 10 g de sal
  • 100 g de miel
  • 70 g de aceite de oliva virgen extra
  • 2 huevos L + 2 yemas
  • 150 ml de agua a 46 ºC

Para pincelar:

  • 1 yema de huevo con un poquito de agua

Preparación

  1. Colocamos la harina en el bol de la amasadora y sin dejar de remover agregamos la sal, la levadura y vertemos la miel, aceite de oliva, los huevos y las yemas.
  2. Vamos agregando poco a poco el agua a 46 ºC mezclando a velocidad baja con el accesorio gancho hasta que terminemos el agua.
  3. Seguimos amasando a velocidad media/baja, durante unos 7 minutos hasta que la masa sea lisa, brillante y ya no se pegue a nuestras manos. Dejamos que la masa se relaje unos 5 minutos.
  4. Pasado este tiempo hacemos la prueba de la membrana. Esto consiste en estirar un trozo de masa entre nuestros dedos, y si el gluten está bien desarrollado, quedará una especie de membrana traslúcida al ponerla a contraluz. Si al hacerla se rompe, significa que necesita más amasado.
  5. Formamos una bola y la colocamos en un bol engrasado. Cubrimos con film de plástico y dejamos levar a temperatura ambiente hasta que duplique su tamaño. Aprox. 2 horas.
  6. Volcamos la masa sobre la encimera y golpeamos un par de veces para quitar el exceso de gas.
  7. Dividimos la masa en 3 partes iguales. Estiramos con ayuda de un rodillo cada una de ellas dejando un rectángulo con un ancho igual al molde que vayamos a utilizar. Una vez enrolladas cada una de las masas, obtendremos 3 rollos de masa brioche.
  8. Sobre un molde con papel vegetal en su base, colocamos los 3 rollos, uno al lado del otro. Dejamos levar a temperatura ambiente metido en una bolsa de plástico grande durante 1 hora.
  9. Precalentamos el horno a 175 ºC calor arriba y abajo.
  10. Batimos la yema de huevo con un poquito de agua. Pincelamos toda la masa.
  11. Horneamos 10 minutos a 175 ºC. Pasado este tiempo bajamos la temperatura del horno a 150 ºC y horneamos 15 – 20 minutos. El brioche debe estar dorado, brillante y con una temperatura interior de unos 87 ºC.
  12. Dejamos enfriar el brioche sobre una rejilla durante al menos 1 hora.
  13. Una vez frío, la miga se habrá asentado y podremos hacer rebanadas perfectamente.

Pala de madera de acacia T&G y bandeja cerámica Emile Henry

Nota: Este brioche de aceite de oliva, tal cual sin nada más, es exquisito. Es ideal para acompañamiento tanto de dulce como salado. Y si lo dejas endurecer unos días te saldrán unas torrijas maravillosas.

Autora de la receta: Mercedes de Merceditas Bakery

Comentarios

Eva dijo:

Y cómo consigues la temperatura del agua exactamente a 46C? Se podría hacer la receta con Thermomix?

Isabel dijo:

La hice la semana pasada y fue un éxito total. A mi hija le encantó. Y es muy fácil. Solo una duda: ¿se podría cambiar la miel por algún sirope o azúcar? Al final me acostumbre, pero el primer bocado me sabía mucho a miel.

Angeles dijo:

Si no tengo amasadora, se puede hacer de forma manual?

María Amparo Mateo Fernande dijo:

Muchísimas gracias por la receta, la hice y salió espectacular!!!

Merceditas Bakery dijo:

Hola Montserrat!

No sabría decirte, nunca he hecho repostería adaptada a diabéticos.
Si la versionas para diabéticos me encantará que lo compartas ;)
Muchas gracias

Merceditas Bakery dijo:

Hola Carmen!

La masa no queda muy pegajosa, es bastante manipulable. ¿Puede ser que no hayas utilizado la harina adecuada?
Lo mejor es usar una miel lo más suave posible para que no de un sabor intenso. No he usado nunca azúcar en esta receta, pero con unos 70 gramos seguro que es suficiente.
Muchas gracias :)

Montserrat dijo:

Tengo una hija diabetica, puedo sustituir la miel por algún edulcorante?? Y que proporción??

Muchas gracias

Carmen dijo:

El resultado es delicioso. La masa quedó muy pegajosa, creo que debido a la miel. El aroma a miel es muy potente. Mi pregunta es, qué cantidad de azucar (moreno) se puede utilizar en lugar de miel, si fuera posible el cambio.

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