Me gusta hacer postres de siempre, postres con historia como estos frisuelos tradicionales que se hacen en Asturias y cuya receta ha ido pasando de padres a hijos una y otra vez.

Se toman en carnaval como si fuera un ritual, pero es fácil encontrarlos en la carta de postres de cualquiera de los muchísimos restaurantes que tiene esta región, con una gastronomía tan rica, durante todo el año.

Hacerlos es muy fácil, hay diferentes formas e incluso se organizan concursos. Ésta que aquí os traemos es una versión deliciosa para los más golosos pues se espolvorean con azúcar de forma que se consigue un almíbar.

Crepera de hierro mineral B con mango de haya De Buyer, aceitera de porcelana Revol y cucharón de acero inoxidable con mango de haya De Buyer

Ingredientes

  • 250 g de harina
  • 250 ml de leche entera
  • 1 cucharada sopera de levadura química
  • 3 huevos
  • Una pizca de sal
  • Azúcar para espolvorear
  • Aceite de oliva virgen extra para freir

Preparación

  1. En un bol ponemos la leche, la harina, la levadura y la sal, batimos y dejamos reposar media hora.
  2. Ponemos una sartén, o mejor la crepera de hierro de De Buyer, a fuego alto con un hilo de aceite; lo equivalente a una cucharilla de café.
  3. Cuando esté bien caliente vertemos la medida de un cucharón de la masa.
  4. Dejamos que dore y damos la vuelta con la ayuda de un tenedor y mucho cuidado.
  5. Colocamos en un plato y espolvoreamos con azúcar.
  6. Tapamos con otro plato para que se conserve el calor mientras repetimos la operación para hacer otro frisuelo más.
  7. Lo colocamos sobre el anterior y volvemos a espolvorear de azúcar.
  8. Vamos añadiendo aceite a medida que se necesite; la crepera debe estar engrasada para que se frían bien.
  9. Cuando hayamos agotado la masa damos la vuelta a los platos para que quede encima el frisuelo que se hizo primero. Con el calor y el peso de los posteriores se habrá ido formando un almibar.
  10. Llevamos a la mesa la pila de frisuelos para que cada uno se sirva con las manos enrollándolos sobre sí mismos.

Crepera de hierro mineral B con mango de haya De Buyer, aceitera de porcelana Revol y cucharón de acero inoxidable con mango de haya De Buyer

Se suelen tomar dos o incluso tres por persona, con cuidado, y un plato debajo para recoger el almíbar. Todo un ritual en muchas casas el hacerlos poco a poco, con tranquilidad y paciencia, hasta completar una buena tanda que os garantizo desaparece al momento!

Autora de la receta: Beatriz de To Be Gourmet

Comentarios

Sara dijo:

Como asturiana me hace especial ilusión ver que has añadido una receta tradicional de mi tierra a tu blog pero, y siempre desde el respeto, te comento que el nombre en asturiano es friXuelos con X y que la masa no lleva ningún tipo de levadura pero sí un par de cucharadas de azúcar y ralladura de limón (fundamental). Espero que os haya servido de ayuda y que pongáis en práctica la receta tradicional real. Un saludo

Vanessa dijo:

Qué entrañables recuerdos de niñez. Frixuelos no en carnaval, sino todo el año, eso sí, los fines de semana. El método que mi madre encontraba más efectivo para conseguir que nos levantáramos de la cama los sábados y domingos, era hacer frixuelos. Nos despertábamos al olor inconfundible de la masa al cocinarse en la sartén y corríamos a la cocina. Mi madre no daba abasto para alimentar a tres bocas voraces. Nunca se acumulaban en la fuente, sino que los iba sirviendo uno a uno al plato directamente y los comíamos calientes, recién hechos. Espolvoreados con azúcar o untados con mermelada. Otras veces con chocolate fundido, si mi madre tenía ganas de liarse más. Para los adultos de la casa, les echaba jamón y queso, champiñones, trocitos de tomate, pimiento… en lo que sería una variante de los galettes de Bretaña. Pero con la misma masa de los frixuelos, un pelín dulce. Fantástico y sutil contraste.
La receta que yo uso y que ha pasado de generación en generación de asturianos, no lleva levadura de ningún tipo. No he visto nunca a nadie usar levadura en la masa de frixuelos, no la precisa. En cambio, la masa debe llevar algo de azúcar (una cucharada o dos para esa cantidad de harina), un poco de ralladura de limón y una cucharada de anís, que le da un aroma y sabor inconfundible. Pero sobre todo, la tradición manda sustituir el aceite de oliva (ingrediente que por desgracia no tenemos en Asturias) por la mantequilla, a ser posible de calidad. El sabor cambia mucho. Exquisito.

Lucía dijo:

Hola Beatriz,

pronto, muy prontito, voy a hacer la receta, pero tengo una duda, en los ingredientes hablas de 3 huevos y sin embargo, en la preparación no los mencionas. Seguramente se te haya olvidado, es así?
Supongo que se incorporan al bol cuando añades el resto de ingredientes…

Un saludo

Lucía

Susana dijo:

En el primer punto faltan añadir también los huevos en el bol para poder batir todos los ingredientes juntos.

Mercedes Chamizo dijo:

En la receta de los disueltos, modo de hacerlo, os falta poner los huevos

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