Aunque todavía no es temporada, hoy os traigo la estupenda receta de alcachofas cacio e pepe al horno, que tenéis que hacer cuando estén en su mejor momento, porque vale mucho la pena. Lo cierto es que las alcachofas me encantan, sea cual sea la forma en la que se cocinen. Si me regalan un ramo de estas flores, ¡me hacen la persona más feliz del mundo!
Esta receta es un combo magistral de ingredientes. El cacio e pepe es un clásico de la cocina italiana, un plato romano en el que la pasta se acompaña de una salsa cremosa a base de queso Pecorino y una generosa cantidad de pimienta negra recién molida. Así pues, como habrás imaginado, las alcachofas de esta receta van a tener una buena cantidad de estos dos ingredientes, a los que añadiremos alguno más para redondear el resultado y que, además de sabroso, aporte ternura a las alcachofas.
Para cocinarlas y presentarlas en la mesa, directamente salidas del horno, usaremos una cocotte de celebración, a la altura de la receta. La cocotte Flamee Dorée redonda Ed. Especial Centenario Le Creuset no solo es una preciosa pieza de colección, sino que es la cazuela ideal para asar las alcachofas en el horno, gracias a su excelente retención y distribución del calor. Es como tener un horno dentro del horno.
Os aseguro que, cocinadas de esta forma, las alcachofas cacio e pepe al horno quedan muy tiernas, aromáticas y con un sabor increíble. El resultado es fabuloso, así que guarda la receta para la temporada de alcachofas, ¡que enseguida está aquí!
Ingredientes
- 4 alcachofas
- El jugo de un limón
- Sal
- 1 taza de pan rallado tostado
- 1 taza de queso Pecorino romano rallado
- 3 cucharaditas de pimienta negra recién molida
- 6 cucharadas de AOVE
- 1/2 taza de vino blanco
- Agua (aproximadamente 1,5 o 2 tazas)
- 2 cucharadas soperas de levadura nutricional (opcional)
- Pecorino romano rallado para acompañar al servir
Preparación
- Calienta el horno a 190º C.
- Pon agua fresca en un bol grande. Añade el jugo de limón recién exprimido y una cucharadita de sal. Remueve hasta que se disuelva.
- Corta el tallo de las alcachofas y también las puntas (aproximadamente unos 2 cm, tal como ves en el vídeo). Recorta las puntas que sobresalgan.
- A medida que las vayas cortando, sumerge las alcachofas en el bol con agua y limón para que no se oscurezcan. Reserva.
- En otro bol más pequeño pon el pan rallado, el queso Pecorino romano, 2 cucharaditas de pimienta negra recién molida, 2 cucharadas de AOVE y una cucharadita de sal. Si usas la levadura nutricional, añádela también en este paso.
- Mezcla bien todos los ingredientes del bol hasta que la textura sea como la de la arena húmeda. Si quedase más espeso, puedes añadir un poco más de AOVE.
- Saca las alcachofas del bol y sécalas lo mejor que te sea posible. Separa las hojas, abriéndolas con cuidado, y reparte la mezcla del pan rallado entre los pliegues de las hojas.
- Dispón las alcachofas en tu cocotte redonda Flamme Dorée Le Creuset. Vierte en la cocotte el vino blanco y añade el agua poco a poco, hasta que cubra 1/3 de las alcachofas.
- Reparte el AOVE restante (4 cucharadas) sobre las alcachofas y sazónalas con un poco de sal.
- Pon a calentar la cocotte en el fuego, a potencia media-alta. Cuando el líquido empiece a hervir, apaga el fuego, tapa la cocotte y llévala al horno con cuidado de no quemarte.
- Asa las alcachofas en el horno sin destapar la cocotte, aproximadamente durante 90 minutos, a 190º C.
- Transcurrido el tiempo, saca la cocotte del horno, llévala a la mesa, destapa y, antes de repartir las alcachofas, echa por encima un poco de queso Pecorino romano rallado. ¡Listas!
Comentarios
- Habrás visto que uno de los ingredientes de la receta es opcional. Se trata de la levadura nutricional, que no tiene que ver con la levadura de cerveza, y es un suplemento nutricional muy interesante, que se extrae de la fermentación de la melaza de la remolacha o la caña de azúcar, y que puedes encontrar en la mayoría de grandes supermercados. Además de sus múltiples beneficios y su alto contenido proteico y en minerales, destaca por su sabor "umami", que recuerda al queso y a las nueces, por lo que va de maravilla en esta receta, aportando un plus a su sabor.
