Hoy te traigo un plato sin misterio, de lo más rápido, sencillo, ¡y resultón! Perfecta para celebrar la noche más terrorífica del año, esta receta de patatas asadas de Halloween, ¡te va a encantar!
Las patatas son un recurso estupendo para acompañar todo lo que cocines. Y si de preparar una mesa de Halloween se trata, ¡con esta receta tienes las de ganar! Porque vamos a convertir unas simples patatas asadas con piel, en unas caras tan aterradoras y monstruosas, que se convertirán en el plato más aplaudido de la noche.
Este tubérculo tiene la dureza perfecta para cortar y vaciar las partes que quieras y dibujar una cara horripilante, con mucho menos esfuerzo del que requiere hacerlo en una calabaza. Además, al hacerlas sin pelar, lo vamos a bordar, porque la piel alrededor de las partes que hemos vaciado se seca más que el resto y crea un efecto mucho más divertido.
Para marcar las partes donde vas a cortar, puedes ayudarte de un punzón o bien hacerlo directamente con el cuchillo que usarás para vaciar; idealmente un cuchillo para verduras y frutas, como este de Opinel, cuya hoja afilada y curva te irá de maravilla. Y si te ves capaz de hacer una obra de arte, puedes armarte con este completo set de Westmark, que al ser perfecto para decorar las calabazas, ¡puede con todo!
Patatas listas y herramientas a punto, ¡que vamos con la receta!
Ingredientes
- Una patata grande o dos medianas por persona*
- Aceite de oliva virgen extra.
- Hierbas aromáticas al gusto: romero, tomillo, orégano, etc.
- Una pizca de sal
*Como os decía al inicio del post, esta receta no tiene mucho misterio. Pero hay algo importante para que salga bien: elegir una buena variedad de patata y que el tamaño de las patatas sea lo más parecido posible, para que se asen todas a la vez.
Preparación
- Calienta el horno a 180 °C.
- Lava bien todas las patatas y sécalas con un paño o con papel de cocina.
- Con cuidado y ayudándote de un cuchillo haz la nariz, los ojos y la boca en cada patata. Para que te sea más fácil puedes dibujarlos marcándolos primero con la punta del cuchillo e ir vaciando cada parte poco a poco.
- Coloca las patatas en una fuente para hornear, con la parte en la que has dibujado la cara hacia arriba y añade un poco de aceite, las hierbas aromáticas y un poco de sal.
- Pon la bandeja en el horno y hornea a 180 °C de 25 a 45 minutos, dependiendo del tamaño de las patatas.
- Cuando las veas doradas, ya estarán listas para servir. Puedes pinchar con un palillo para asegurarte que estén totalmente cocidas.
- Llévalas a la mesa y disfrútalas acompañadas de tus salsas favoritas, o de un buen queso fundido.
Notas
- Si decides asar patatas grandes, antes de ponerlas en la bandeja en la que las vas a hornear, haz dos o tres agujeros con un palillo o una brocheta en la parte posterior, para ayudar a que se asen enteras por igual.
- Las patatas asadas son un acompañante de primera para cualquier plato. Y con queso fundido es un ejemplo de matrimonio perfecto. Aprovecha que enciendes el horno para asar las patatas y pon también la quesera con un camembert, un poco de aceite y una ramita de romero. ¡Un maridaje excepcional!
- ¡No tires los restos de los cortes de las patatas! Puedes dejarlos cubiertos de agua en la nevera hasta el día siguiente y añadirlos a un puré o freírlos y echarlos en una tortilla. O añadirlos en un ramequín en la misma bandeja del horno junto a las patatas, y aprovechar para que se asen (con un poco de sal, pimienta, aceite y tomillo tendrás un picoteo más... que con un poco de salsa brava o mahonesa volará en la mesa).
- Adereza las patatas como más te guste. Por ejemplo, puedes añadir unos dientes de ajo sin pelar a la misma bandeja de las patatas y, luego, en la mesa, usar esos ajos asados para saborizar las patatas. También puedes acompañarlas de tu salsa favorita o un aceite aromatizado a las hierbas o picante.
¡Variaciones de la receta!
- Si quieres asegurar que quedan asadas rápidamente, prefieres hacer un bocado en lugar de un acompañamiento o servir un picoteo de lo más atractivo, puedes laminar las patatas en lugar de hacerlas enteras. Así, tardarás algo más en "dibujar" ojos y bocas, porque tendrás más a hacer, pero se hace más fácilmente al ser los cortes delgados y ganarás mucho tiempo de horneado.
- ¡También puedes usar batata! El boniato asado está riquísimo, así que puedes hacer boniatos enteros o láminas de boniato asados monstruosos para Halloween también... o para animar un día cualquiera. ¡A los peques les encantará!
Comentarios
Rosi dijo:
Con lo caro que sale cocinar en el horno, pienso que es mejor cortarlas a lo largo por la mitad y de cada mitad de patata, saldrán 2 caras. Así se ahorra más. Es una idea divertida y a partir de ahí, se puede dar rienda suelta a la imaginaciòn y al arte: pelo de fideos de lo que sea…
Rosi dijo:
Con lo caro que sale cocinar en el horno, pienso que es mejor cortarlas a lo largo por la mitad y de cada mitad de patata, saldrán 2 caras. Así se ahorra más. Es una idea divertida y a partir de ahí, se puede dar rienda suelta a la imaginaciòn y al arte: pelo de fideos de lo que sea…