Crumble de boniato o batata

Estamos en otoño, y es tiempo de castañas, boniatos y calabazas; parece que empieza a apetecer hornear pasteles, pies, bizcochos y tartas con manzanas y peras. En cierto modo nos apetece encender el horno para impregnar nuestra casa de esos aromas de mantequilla, canela y azúcar tan embriagadores. ¡Si pudiéramos conservar ese olor en un bote de cristal y abrirlo de vez en cuando!

En esta ocasión he preparado un increíble Crumble con una base de boniato. El boniato es una de las hortalizas que más asociamos con el otoño y es uno de los tubérculos más dulces que hay, de fácil digestión y con poder antioxidante, es un producto que deberíamos incluir en nuestra dieta más a menudo.

Aprovechando el dulzor natural que posee podemos preparar un delicioso postre o capricho de media tarde. La cobertura de este crumble está hecha en base a harina, mantequilla, nueces, canela y melaza. No podrás dejar de probar este postre de cuchara cuando esté templado.

Aceite de nueces La Tourangelle y molde cerámico redondo Emile Henry

Ingredientes

• 4 boniatos medianos
• 60 ml de jarabe de arce o de agave
• 2 cucharaditas de extracto de vainilla
• 2 cucharadas de aceite de nuez La Tourongelle
• 1 cucharadita de canela molida
• 100 ml de nata liquida (yo nata vegetal de arroz)
• 4 cucharadas de mantequilla salada derretida
• 2 huevos

Cobertura del Crumble:

• 175 g de harina
• 75 g de mantequilla fría cortada a dados
• 50 ml de melaza o jarabe de arce o de agave
• 50 g de nueces picadas groseramente
• 1 cucharadita de canela

Opcional para servir:

• 2 cucharadas de mantequilla derretida
• 60 ml de jarabe de arce

Elaboración

1. Precalienta el horno a 200ºC. Engrasa un molde de cerámica apto para horno con un poco de mantequilla (yo he usado el molde cerámico redondo de Emile Henry).
2. Pincha los boniatos y hornéalos durante 1 hora o hasta que estén blandos y tiernos. Cuando estén cocidos sácalos del horno, ábrelos por la mitad y deja que se enfríen.
3. Reduce la temperatura del horno a 180ºC.
4. Bate los huevos y reserva. Pela los boniatos y tritúralos en un bol y seguidamente añade la vainilla, el jarabe de arce, la nata líquida, el aceite de nuez, la mantequilla y finalmente los huevos, mezclando bien con una espátula hasta que se hayan integrado. Vierta la le mezcla en el molde que has engrasado.
5. Prepara el crumble. En un bol mezcla la harina, la canela y la melaza. Añade la mantequilla fría y cortada en dados y mezcla con la yema de los dedos para formar una especie de serraduras. Añade las nueces y mezcla un poco más. Reserva.
6. Cubre la superficie del molde con el crumble e introduce en el horno durante 30-40 minutos, hasta que la superficie esté dorada.
7. Sirve caliente o templado. Opcionalmente puedes calentar 2 cucharadas de mantequilla en un cazo con 60 ml de jarabe de arce y verter justo antes de servir.

Aceite de nueces La Tourangelle y molde cerámico redondo Emile Henry