Juana, autora de La Cocina de Babel, nos trae una receta de lo más saludable y perfecta para los meses fríos: crema de kale y guisantes con queso de cabra. Inspirada en una receta de Donna Hay, ¡Es en una crema riquísima que querrás repetir una y otra vez!
Cuando era pequeña, en las noches frías de invierno, mi madre siempre nos servía una deliciosa sopa caliente acompañada de pan fresco y mantequilla, nada extravagante y complicado: verduras y vegetales combinados en función de lo que había en la nevera, lo que hacía que nunca fuesen exactamente iguales y daba lugar a comentarios del tipo “¡qué buena mami!”, o bien “hoy no me gusta nada”, a lo que ella contestaba “te la vas a comer igual”... Ella heredó esa costumbre de mi bisabuela y yo como buena hija de mi madre la mantengo en mi propia casa.
Pero el tiempo pasa y los tiempos cambian. Ahora hasta una humilde sopa o crema puede volverse algo sofisticado combinando vegetales y sabores que hasta hace relativamente poco eran desconocidos. Es el caso del kale, un vegetal que pertenece a la familia de las coles, de bajo poder calórico y rico en minerales y vitaminas, lo que lo ha convertido en una verdadera estrella “healthy” y la protagonista de la crema que os traigo hoy: una receta de la famosa Donna Hay que yo he adaptado un poco a mi gusto personal, he cocinado en mi preciosa “faitout” de Emile Henry y espero disfrutéis en alguna noche fría de invierno.
Cacerola cerámica "Faitout" Emile Henry, plato cerámico Nezumi de Tokyo Design Studio y bol de porcelana Seigaiha de Tokyo Design Studio.
Ingredientes (para cuatro personas)
- 1 litro de caldo de pollo o verduras
- 1 diente de ajo
- 1 ramita de romero fresco
- 150gr de kale
- 200gr de espinacas “baby”
- 400gr de guisantes congelados
- 100gr de queso fresco de cabra
- 1 cucharada de aceite de oliva virgen extra Trilloliva
- Sal y pimienta recién molida
- Hojas de hierbabuena para decorar
Preparación
- En primer lugar lavamos y escurrimos las verduras. Retiramos los tallos del kale y sobre una tabla de cortar picamos bien fino éste y el diente de ajo.
- Calentamos el aceite en la “faitout” e incorporamos el diente de ajo picado y el kale, removemos durante unos segundos y cuando el kale comience a ablandarse, incorporamos las espinacas y los guisantes. Volvemos a remover el conjunto, añadimos el caldo, salpimentamos al gusto e introducimos la ramita de romero.
- Llevamos a ebullición y bajamos a fuego medio, cubrimos con la tapa de la “faitout” y continuamos la cocción durante unos quince o veinte minutos, hasta que los guisantes estén tiernos.
- Mientras se hace la crema, disponemos el queso de cabra sobre un plato o bol, trituramos con un tenedor y reservamos.
- Pasado el tiempo de cocción, retiramos la ramita de romero y trituramos la crema con una batidora hasta obtener una crema de un precioso color verde intenso.
- Servimos la sopa bien caliente con el queso de cabra repartido por su superficie y decorada con las hojitas de hierbabuena.
Cacerola cerámica "Faitout" Emile Henry, plato cerámico Nezumi de Tokyo Design Studio, cuenco cerámico Nezumi Tokyo Design Studio y bol de porcelana Seigaiha de Tokyo Design Studio.
Comentarios
Claudia dijo:
Qué bien Aurora!! Feliz de que te haya gustado, me consta por otras fuentes que ciertamente sale muy rica! A disfrutarla mucho este invierno :)
Aurora Grau dijo:
Muchas gracias por la receta, esta buenísima!! Tenía una pinta fantástica y no me ha defraudado. Para repetir , seguro!