¿Pensabas que el soplete de cocina solo servía para caramelizar azúcar? ¡Nada más lejos de la realidad! Este pequeño gran aliado tiene muchísimos usos, desde acabar recetas con un toque genial a usarlo para preparar los alimentos para lo que vayas a cocinar y ganar tiempo. Si ya tienes un soplete –o estás pensando en hacerte con uno– y quieres descubrir cómo sacarle el máximo partido, sigue leyendo: en este post te contamos todas las ideas que utilizan los chefs profesionales… y que, por supuesto, tú también puedes poner en práctica en casa de la forma más fácil.
Algunos usos que darás al soplete (y sigue leyendo, ¡por qué hay más!):
(Por orden de izquierda a derecha de la imagen) Para dar un toque asado a tus recetas, derretir el queso de tus hamburguesas americanas, quemar azúcar, quemar los pelos del pollo, cerdo y otras carnes, gratinar en modo exprés, dar un toque ahumado al salmón, ahumar con campana o incluso tostar un poco de pan.
1) Cómo se usa un soplete de cocina y cuál me conviene
Usar un soplete de cocina es muy sencillo: solo necesitas llenarlo con gas butano (del que puedes comprar en cualquier estanco, como el que se usa para los mecheros tipo zippo), girar la válvula de +/- para dejar salir el gas y apretar el botón para que haga chispa y se encienda. Con la misma válvula podrás regular la llama según tu necesidad, y si la cierras apagarás el soplete. ¡Es solo un clic encender el soplete!
Una vez encendido, acerca la llama a unos centímetros del alimento y muévelo en círculos para obtener un dorado uniforme, sin quemar.
¿Qué soplete comprar?
Si estás pensando en hacerte con un soplete, en nuestra tienda encontrarás dos opciones de KitchenCraft que funcionan de maravilla y son de lo más fáciles de usar y guardar:
- El Soplete Professional Masterclass, robusto y de gran capacidad, ideal si le vas a dar un uso frecuente.
- El Soplete de cocina KitchenCraft, práctico y perfecto para un uso doméstico ocasional.
- Uno de los más populares y ofrece un gran rendimiento, tanto a particulares como profesionales, el Soplete de cocina Rösle.
Todos ellos son fáciles de recargar, ofrecen una llama regulable y te permitirán caramelizar, gratinar o dorar tus platos con total seguridad y resultados de chef.
2) Para qué se usa un soplete de cocina
Un soplete de cocina va genial para caramelizar el azúcar en la crema catalana, en una tarta de queso, o dar un toque cuando preparas un capuccino.… pero ¡Sirve para mucho más que eso! Te cuento los infinitos usos que puedes darle:
El soplete para preparar los alimentos que vas a cocinar
- Es genial para Pelar tomates o pimientos: pásales el soplete y retira la piel en segundos (evita así hervir los tomates y dejar los pimientos en el horno).
- Te irá genial para quemar los pelillos de la piel del pollo, piernas o oreja de cerdo, e higienizar otras piezas de carne.
Cocinar carne con soplete
- Úsalo para dorar bacon o jamón, lo haces crujiente sin pasarlos por la sartén.
- Dora carnes o costras de asados que han quedado pálidas en el horno.
- Incluso puedes usarlo para tostar un poco de pan justo antes de servir, sin encender la tostadora ni ponerlos en la parrilla.
Cocinar pescado con soplete
- Marca el salmón, dejando el interior jugoso, sin tocar ninguna parrilla.
- En pescados, también puedes usarlo para crear una piel crujiente y sabrosa, y dar un toque final más asado o ahumado 🐟 Puedes aplicarlo en piezas con escama pequeña y pegada, como el salmón con piel, la dorada o el lubina.
- Si te gusta la cocina japonesa, usa el soplete para piezas crudas: Quema ligeramente la superficie y realzas el sabor del marisco sin cocinarlo del todo, Potencias el aroma y transformas la textura. Es ideal para nigiris de gamba, vieira o atún graso.
El soplete en repostería
- Carameliza fruta o cítricos para decorar postres o cócteles.
- Quema el azúcar en la crema catalana o en el azúcar que puedas aplicar para coronar tartas de crema o tartas de queso para un acabado bonito y crujiente.
- Es ideal para fundir rápidamente un poco de chocolate, sin baño maría ni microondas, o asar nubes para el toque final de las tartas, ¡Eso en un momento!
- Para dar un acabado tostado a un merengue o tarta con merengue.
Para acabar los platos
- Úsalo para gratinar quesos sobre pasta o verduras sin encender el horno.
- Para dar un acabado crujiente a verduras: por ejemplo, gratinar rápidamente la superficie de unas berenjenas rellenas o de unas coles de Bruselas cocidas para darles un toque caramelizado.
- ¡Y es tu mega aliado cuando preparas hamburguesas americanas!
- Si tienes una campana de cocina, puede también usarlo para que tu receta coja un toque ahumado.
- Si quieres servir un capuchino, puedes aplicar un poco de azúcar en la espuma superior y darle un acabado tostado.
3) Cómo quemar azúcar con soplete
Una de las aplicaciones más comunes con un soplete de cocina es quemar el azúcar. Si tienes dudas de cómo se hace, solo necesitas un soplete. Con él puedes “quemar” el azúcar de forma controlada —en realidad, caramelizarlo— para lograr un acabado brillante y un toque de sabor irresistible. Para ello, solo tienes que:
- Espolvorea una fina capa de azúcar.
- Enciende el soplete y mantén la llama a 5–7 cm del azúcar.
- Muévela en círculos hasta que el azúcar se funda y dore (verás que en pocos segundos el azúcar va evolucionando, primero se convierte en gotas, luego se va fundiendo en una sola capa y va cambiando el color a dorado).
- Para el soplete cuando consigas el nivel de tueste que te guste en el azúcar quemado.
- Deja enfriar un par de minutos para que el caramelo endurezca.
4) ¿Se puede gratinar con un soplete de cocina?
Sí, se puede gratinar perfectamente con un soplete de cocina, y es una de sus utilidades más prácticas. Al encenderlo y regular la llama a intensidad media, puedes:
- Gratinar quesos en pasta, lasaña, verduras o en la superficie de unas patatas gratinadas, sin encender el horno.
- Dar un toque dorado a bechameles, purés o soufflés que han quedado pálidos.
- Acabar hamburguesas fundiendo el queso en segundos.
Mantén siempre el soplete a unos 5–7 cm de distancia y mueve la llama en círculos para que el calor se reparta de forma uniforme y no queme un solo punto.
¿Ya tienes tu soplete de cocina? Porque, ya verás, cuando le coges el truco… ¡lo usarás para un montón de recetas y no podrás vivir sin él!
