Luisa Morón, bloguera gastronómica de www.cocinandoconmicarmela.com, nos hace la boca agua con una receta que os encantará: es fácil de preparar, su base es de pasta (¡éxito asegurado!) y es deliciosa. ¡Os animo a probar!
Pasadas las fiestas es hora de comer en casa y de forma sana. Nuestra receta habla hoy de un ingrediente muy socorrido y agradecido: la pasta. Si sabemos combinar una buena pasta con unos buenos ingredientes podemos conseguir platos de auténtico lujo.
Hoy me he decidido por los tallarines, un tipo de pasta alargada, de ancho pequeño y forma achatada que integran el conjunto de las pastas secas de origen italiano. Aunque los que se conoce en toda Europa y otros sitios directamente de Italia, existe la polémica sobre su origen ya que en China se vienen preparando fideos semejantes a los tallarines desde más de un milenio antes que en Italia. La diferencia radica en la harina, los chinos son de arroz o soja mientras que los tallarines italianos el origen es de trigo.
Para la cocción de esta pasta he utilizado una cacerola, pero a la hora de rehogarlos lo he hecho con mi nueva Saute de “Le Creuset”. Pasamos ya a la preparación.
Ingredientes (para 2 personas):
200 gr de tallarines
4 níscalos grandes
2 dientes de ajos
Romero al gusto
Parmesano al gusto
Aceite, pimienta y sal
Preparación:
Introducimos la pasta en agua hirviendo con sal. Miramos las recomendaciones de cocción en cuanto a tiempo. De cada uno depende que se prefiera la pasta más “al dente” o no.
Mientras, laminamos los dientes de ajos y troceamos los níscalos en daditos pequeños. En nuestra Saute añadimos 3 cucharas de aceite y si queréis podéis añadir un poco de mantequilla (tamaño de una nuez). Cuando el aceite esté caliente, añadimos el ajo laminado y doramos con cuidado de que no se queme, añadimos los níscalos y doramos durante unos 10 minutos.
Cuando estén listas las pastas añadimos a la sartén y rehogamos, movemos con una paleta de madera para no rallarla. Añadir el romero para que suelte la esencia, si no te gusta puedes prescindir de él. Salpimentamos y seguimos rehogando unos 5 minutos, no más.
Un consejo: cuando añado los tallarines, del mismo agua de la cocción añado dos o tras cucharas; de esta forma los tallarines no se agarran.
Listos para servir. Podemos añadir parmesano rallado si gusta.
Una receta fácil y sencilla de hacer. Espero que la disfrutéis tanto como yo.